Plegaria a un Labrador

Levántate y mira la montaña
de donde viene el viento, el sol y el agua.
Tú que manejas el curso de los ríos,
tú que sembraste el vuelo de tu alma.

Levántate y mírate las manos,
para crecer estréchala a tu hermano
juntos iremos unidos en la sangre,
hoy es el tiempo que puede ser mañana.

Líbranos de aquel
que nos domina en la miseria,
tráenos tu reino de justicia e igualdad,
sopla como el viento
la flor de la quebrada
limpia como el fuego
el cañón de mi fusil.

Hágase por fin tu voluntad
aquí en la tierra
danos tu fuerza y tu valor
al combatir
sopla como el viento
la flor de la quebrada
limpia como el fuego
el cañón de mi fusil.

Levántate y mírate las manos,
para crecer estréchala a tu hermano
juntos iremos unidos en la sangre,
ahora y en la hora de nuestra muerte
amén, amén, amén